El Grupo Municipal del BNG en el Concello de Ourense emitió un comunicado ese lunes dirigido al Gobierno municipal, en el que pide públicamente al alcalde, el socialista Agustín Fernández, y su equipo de Gobierno, "que estableza as medidas opotunas para que este tipo de situacións non volvan acontecer, nin gastos de difícil xustificación nin filtracións interesadas", dicen refiriéndose a informaciones publicadas en un medio de comunicación que revelan que el PSOE prestó a un funcionario de este Concello 21.000 euros.

Los nacionalistas aluden a una información más de las emitidas por medios de comunicación ourensanos en relación a la división interna que sufre el Gobierno municipal ourensano, internamente dividido entre los denominados "pachistas" o partidarios del aparato oficial del partido y, por ello, alienados con los secretarios Raúl Fernández y Pachi Vázquez; y los "paquistas" o antes de Paco Rodríguez, ex alcalde de la ciudad, y ahora de Agustín Fernández, su sucesor el cargo. Entre ambos grupos existe una marcada fractura que se manifestó plenamente con la imputación de Francisco Rodríguez en la Operación Pokemon, su dimisión y luego el relevo en la alcaldía.

Ahora, los nacionalistas, ex socio del Gobierno municipal a partir del mencionado hecho, hablan de "tensión interna", de "enfrontamento no Grupo de Goberno socialista" y de "actuacións indebidas que provocan rexeitamento e descrédito". Si bien en relación al préstamo de los 21.000 euros al funcionario del Concello no aclaran nada, y se refieren al asunto en el marco, únicamente, de la financiación de los partidos políticos. Respecto a la que dicen que para dicho financiamiento "existen os mecanismo de contral, neste caso concreto a través do Tribunal de Contas que audita os gastos dos grupos políticos municipais".

"Situacións como as que hoxe vive o Concello de Ourense, en permanente desestabilización, provocan  políticas erráticas e erradas. Estas políticas, aplicadas por un goberno que perde máis tempo en debates internos que en aportar propostas ou levar adiante as que outros grupos elaboran, contribúen ao deterioro da imaxe pública das institucións, neste caso a local, nun momento de gran cuestionamento do sistema", concluye el comunicado emitido por el Grupo Municipal del BNG en el Concello de Ourense