La instalación de suelos absorventes en los cauces del Limia y del Canal de A Lagoa de Antela, además de estructuras flontantes a base de corteza de eucalipto en las zonas de Porto Quintela y O Corgo, Muiños, son las medidas experimentales que los técnicos han elegido para tratar de evitar que en veranos próximos no se reproduzca el episodio de cianobacterias en el Embalse de As Concheas del de 2011.
Así lo acordó la segunda de las reuniones de la denominada "Comisión de seguimiento del Embalse de As Conchas", en la que estuvieron presentes técnicos de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil encabezados por su presidente, Francisco Marín, y el subdelegado del Gobierno en Ourense, Roberto Castro, además de representantes y técnicos de las consellerías de Medio Rural e do Mar y de Sanidade de la Xunta de Galicia, de Augas de Galicia y de la empresa concesionaria del aprovechamiento hidroeléctrico, Gas Natural-Unión Fenosa.

Con la primera de las acciones, la instalación de suelos absorventes, se tratará de reducir la presencia de nutrientes en las aguas embalsadas de As Conchas.
Se trata de una medida experimental cuyos resultados habrá que comprobar sobre la marcha. En teoría, se cuenta con que, al hacer pasar las aguas a traves de estas estructuras (los suelos absorventes), los nutrientes queden retenidos y su concentración en el agua disminuya considerablemente antes de llegar las corrientes al Embalse.
Para conocer la efectividad del sistema se incrementarán las analíticas hasta constatar el grado de descenso de dichos nutrientes, causa principal del bloom de las cianobacterias que contaminaron este pasado verano el Embalse de As Conchas.

A esta acción, también con carácter experimental, se añadirá la instalación de estructuras flotantes con corteza de eucalipto en las zonas de baño de Porto Quintela, en Bande, y O Corgo-A Rola, en Muiños.
Se trata de aprovechar una experiencia muy similar desarrollada por Augas de Galicia el pasado año en el Embalse del Umia. La corteza de eucalipto crean en las aguas un entorno desfavorable a las cianobacteris, con lo que estas deberían, cuando menos, reducir su presencia también en el Embalse de As Conchas.