La próxima vendimia volverá a estar marcada por la incertidumbre en los precios de la uva, augura Fruga al ver muy difícil que pueda llegarse al mes de septiembre con acuerdo alguno al respecto entre bodegueros y productores.
Fruga culpa de la situación a la Consellería de Medio Rural de la Xunta de Galicia, y cree que en ningún momento se han dado los pasos suficientes y con la suficiente intensidad y firmeza para lograr acuerdos en este sentido.

De hecho recuerda que ya en septiembre del pasado año el secretario xeral de Medio Rural e Montes, Tomás Fernández Couto, había anunciado un preacuerdo de precios para la Denominación de Origen Rías Baixas, "que a día de hoxe non tiveron a máis mínima verificación", añade la Fruga.
En el caso de la D.O. Ribeiro, se recuerda que desde el pasado año se vienen celebrando reuniones "exploratorias". "Como se fora á procura dun planeta moi lonxano, o contrato do Ribeiro segue a ser unha misión exploratoria", dice la Fruga.

La organización sindical recuerda que, "nunhas condicións normais e nun país normal", los acuerdos del sector vitivinícola deben cerrarse antes de la floración, lo que no ha ocurrido, por lo que el sector volverá a verse envuelto en una "tensa imprevisión" que no beneficia nunca ni a productores ni a bodegas ni cooperativas.
Tampoco en Monterrei hay acuerdo de tipo alguno.

En tal situación, Fruga hace un llamamiento con carácter de urgencia a la Consellería de Medio Rural "para que faga obriga das súas responsabilidades no que respecta a convocar as mesas de negociación". Y llegado el momento, que la Consellería insista en que nadie debe levantarse de dicha mesa y abandonar la negociación mientras no se consiga algún acuerdo.