Las obras del Hospital de Piñor para su adaptación a Centro de Rehabilitación Psiquátrica comienzan ya con retraso. El 24 del pasado mes de mayo el SERGAS anunciaba que el inicio de los trabajos se produciría con el mes de junio para finalizar en septiembre.
No sólo no ha ocurrido, sino que el SERGAS no ha hecho más trámites municipales que los de una solicitud de licencia municipal para llevar a cabo las obras de una “habitación piloto” en una de las más de 70 que existen en este inmueble.

En el Concello de Barbadás, según ha podido saber Ourense Dixital, la única solicitud de licencia de obra que consta es esta, y se refiere a trabajos de carpintería e instalación de “un plato de ducha”.
Mientras el BNG en este Concello confirmó tales extremos, los trabajadores se mostraban sorprendidos este jueves tanto por la escasa envergadura de las obras solicitadas, como por el hecho de no hallar sentido a la construcción de dicha “habitación piloto”.

Según el SERGAS, Piñor como hasta ahora estaba sucumbe a un proyecto de unificación de Medicina Interna en el propio Complejo Hospitalario de la capital. En Piñor quedarán dos plantas libres, que a su vez quedarán como “reserva asistencial”. A una de ellas es a donde se planteó en su momento la posibilidad de trasladar el Psiquiátrico de Toén.
Las obras anunciadas van desde la sustitución de los sistemas contraincendios en su práctica totalidad, hasta la instalación de sistemas de seguridad y circuito cerrado de televisión, un plan de protección en puertas y de sectores resistentes al fuego, y un sistema de ventilación general.
Así mismo, se sustituirán las ventanas de la fachada por “vidrio con aislamiento térmico y de seguridad”, y en los interiores será preciso revisar y adecuar todas las instalaciones, entre ellas las de fontanería, electricidad, carpintería, falsos techos, etc.

Sólo 4 del centenar largo de trabajadores que este 30 de junio se despidieron de Piñor estarán aquí para verlo.