Ante los daños que se han producido en la Capilla de Os Remedios de esta ciudad, concretamente en una escultura perteneciente a este recinto, el Concello de Ourense ha enviado este jueves un escrito a la Xunta de Galicia en el que recuerda a la Administración Autonómica el estado de las gestiones llevadas a cabo, y que ni lo ocurrido ni la situación en la que continúa la Capilla es competencia ni responsabilidad de la administración local.

El Concello habla de "reiteración da propiedade na inactuación" es decir, la poca o nula disposición de los propietarios a resolver el problema generado por el siniestro de finales de julio de 2010, así como que el Concello actuó hasta donde sus competencias le permiten desarrollando el "Proxecto de Consolidación e Demolición da cuberta da Ermida", como obras de urgencia y para evitar un deterioro del estado del recinto que podría acrecentarse. Esas obras supusieron una cuantía aproximada de 50.000 euros, que el Concello de Ourense adelantó de las arcas municipales, sin que dicha cantidad haya podido recuperarla hasta el momento.

Recuerda el Concello que desde entonces hubo varias reuniones entre los representantes de los propietarios de la Capilla, los de la Iglesia, la Deputación de Ourense, subdelegación del Gobierno y la Consellería de Cultura. Todas ellas fueron a instancias del propio alcalde, y no han desembocado en actuación alguna.
El Concello de Ourense invoca, además, la lay que establece que son los propietarios de terrenos, construcción e cualquier otra instalaciones los responsables y encargados de mantenerlos en condiciones de funcionalidad, seguridad y salubridad, así como de evitar su pérdida, destrucción o deterioro. Y que en tal caso están los de la Capilla de Os Remedios.
En el caso de este recinto, el Concello de Ourense entiende que, con el daño sufrido por la escultura, los propietarios han incurrido en "infracción de carácter grave ou moi grave", infracción que compete reclamar a Patrimonio de la Xunta de Galicia, al tiempo que se recuerda que la Capilla está afectada por una declaración BIC de la Xunta, Bien de Interés Cultural.

La Capilla de Os Remedios fue pasto de las llamas a finales del mes de julio de 2010. Desde entonces, el recinto ha permanecido cerrado y ajeno al culto, siendo los trabajos de derrumbe de la techumbre y de aquellos elementos que comportaban riesgos que acometió en su día el Concello de Ourense, los únicos que se han llevado a cabo en los 22 meses que van transcurridos desde el siniestro.