Al final los populares se quedaron solos en el pleno de septiembre de este viernes, defiendo la propuesta de "incremento cero" de las tasas e impuestos municipales para el año que viene. Sin embargo, los portavoces de los grupos de Gobierno, PSOE y BNG, se cuidaron mucho de cuestionar la popularidad de la medida defendida por Enrique Nóvoa, y se remitieron, en el caso de Agustín Fernández, a que resulta legalmente irrealizable, mientras Sánchez Vidal aconsejó revertir el superávit en bienes y servicios para el ciudadano.
Nadie discutió, y menos rebatió, el argumento manejado por los populares: que hay superávit en la caja municipal ourensana como en ningún otro concello de las siete grandes ciudades gallegas. Sin embargo, Agustín Fernández explicó que la propuesta de los populares es legalmente irrealizable, ya que un superávit no se puede administrar compensando el déficit de ingreso que produciría no aplicar siquiera el incremento correspondiente al IPC, como proponían los populares.
Por su parte, el portavoz del BNG, Alex Sánchez Vidal, que llegó a ironizar por momentos con la propuesta popular, incidió en que era mucho más conveniente revertir ese superávit en bienes y servicios para el ciudadano, a través de obras e inversiones a desarrollar en la ciudad.
Si se le admitió a los populares un aspecto de su propuesta, que el grupo de gobierno recogió incluso con cierto agrado: la que hacía referencia a la exención de tasas en la expedición de algunos documentos, como son los certificados de empadronamiento o los compulsados de documentación municipal.
La mayoría de Gobierno vino a decir al respecto que se hará, aunque no se especificó a partir de cuándo, exactamente. |