Los no menos de 1.436.985 euros que munícipes y personal de confianza cuestan al año a las arcas municipales, no están lejos de lo que cuesta todo el personal asignado a Dependencia y a Ingeniería y Aguas, pero están por encima y hasta muy por encima del de otros servicios más necesarios y útiles para el ciudadano.

Los políticos y sus afines cuestan más que la plantilla asignada a Cultura. Y aunque no cuestan más que la de Educación, es más de 4 veces que lo que el Concello ourensano prevé asignar en ayudas a material y libros escolares (30.000 euros) y a los comedores escolares (304.000 euros) del próximo curso escolar. Está por encima del coste de la plantilla asignada a Formación Ocupacional; duplica con creces la de Drogodependencias, Cementerios y Recursos Humanos; y cuadriplica lo mismo que la de Comercio que la del Centro de Información á Mulleres Maltratadas, la de Sanidade, la de la Administración Xeral de Servizos Sociais y la de Turismo.

160 veces lo que en Premios y Certámenes de Educación en compra de prensa y revistas

Los Presupuestos de 2018 siguen contemplando una partida de gasto en Publicidad y Propaganda, que en 2018 será de 545.000 euros. Otros 120.000 euros aparecen consignados a "Adquisición de prensa, revistas y publicaciones". Cualquiera de los dos gastos superan con creces los 6.700 que el Gobierno de Vázquez Abad contempla invertir en la Implantación de la Identidad Corporativa del Concello. Sólo en comprar prensa, revistas y otras publicaciones, el Concello gastará 35.000 euros menos que todo lo que en telefonía fija, móvil y ADSL. Y mucho más, por supuesto, que los 750 euros que consigna en 2018 a "Premios y certámenes de Educación". Y ello sin obviar que el Gobierno ourensano sigue gastando en tan anticuado como escasamente apropiado concepto como es el de "Propaganda".