El cauce fluvial del Támega y el espacio agrícola de A Veiga de Chaves, son los elementos diferenciadores y generadores de identidad y espacio común de las instalaciones termales de la Eurocidade Chaves-Verín. Así lo concluye el equipo multidisciplinar que ha tomado parte en un foro organizado al respecto por la Fundación Juana de Vega a través de la Escola Galega de Paisaxe con el apoyo de la Deputación de Ourense y la propia Eurocidade Chaves-Verín.

El seminario As idades da auga ha concluido resaltando el papel integrador del agua y la necesidad de cuidar y proteger un recurso catalogado como "milenario" en la Eurocidade. Entre sus conclusiones, los técnicos indican que "a riqueza da estrutura agraria e a tradición rural da contorna aparecen coma unha das claves revitalizadoras e lugar de encontro da poboación da Eurocidade". Para conseguir los objetivos, han surgido varias propuestas que convergen en la necesidad de la limpieza y la recuperación de la calidad de agua a partir de sistemas de filtros vegetales de macrófitas a lo largo del río o en puntos concretos, con lo que ha de contribuirse tanto a su limpieza como a mejorar el curso fluvial paisajísticamente. Y entre las propuestas existe una para estudiar aprovechar el agua termal para cultivos hidropónicos que, aprovechando el calor sobrante del agua, generen algas destinadas a la fabricación de cosméticos.

En cuanto a la revitalización de A Veiga de Chaves y su transformación para la agricultura ecológica, se considera que podría aportar valor añadido a los restaurantes y balnearios de la zona. Sería conveniente constituir una denominación de origen con sede en la zona fronteriza para la distribución de productos de la huerta a esos locales próximos. El foro concluye al respecto indicando que sería adecuado para ello crear un sistema transversal al eje norte-sur, capaz de integrar todo el valle y su población en la realidad de la Eurocidade Chaves-Verín a través de unas relaciones fluidas entre instalaciones termales y el río Támega.