160.000 €, ¿y ahora qué?...
 
Por HIDACIO DA LIMIA
20 de DICIEMBRE de 2010: OURENSE DIXITAL

Como dice el refrán ”éramos pocos y…”
Efectivamente, como dice la famosa ley de Muphy cuando algo va mal siempre  es susceptible de empeorar. Y esto parece ser que es lo que pasa en A Limia.
La situación económica vara para casi todos mal, los Concellos de la Limia están, como todos, pasando unos malos momentos y ahora por sentencia del TSXG, de este mes de diciembre, la Mancomunidad de Concellos de A Limia está mal disuelta. Como primera medida tiene que abonar a sus no trabajadores la friolera de 160.000 € en concepto de atrasos de convenio.

A estas alturas, muy pocos, casi nadie, se acordarán de la famosa huelga de la basura de aquel verano que llevó a la toma de la decisión, de los alcaldes, que en aquel momento llevaban las riendas de la misma, de disolver la Mancomunidad.
¿Y ahora que?.
Si hacemos una retrospectiva la mayoría ya no están y el marrón les cae a los actuales. Haciendo memoria, el último presidente, el ex alcalde de Os Blancos Juan José Puga, ya no se dedica a la política, no porque él no quisiera, aunque así lo pareciese, sino porque parecía que estorbaba. O quizás, simplemente, tomó él la decisión y no quiso seguir.
Parece que la auditoria que se está realizando en este Concello, no tiene ninguna buena pinta. Otra vez, como la semana pasada, también alguna de las claves las tiene el que está en O Pereiro.

Otro de los alcaldes que también tomó la decisión y que en aquel momento estaba en el bando contrario fue el irreverente con la justicia Xaquín de Rairiz. Quizas por estos motivos también está intentando ahora acercarse al poder, a ver si así se solucionan sus problemas de Concello y personales con la justicia. Pero como dice un famoso fiscal de la audiencia de Ourense, “la justicia es como un elefante, lento, pero con mucha memoria”, y este es un ejemplo: después de 4 años, la justicia dice lo que ya decía el informe del Consello Consultivo de la Xunta.

El otro que pinchaba y cortaba en el asunto era Isáac Vila, alcalde de Xinzo, que hoy ya parece que ni pincha ni corta en Xinzo (no se lo crean), pero de esto hablaremos en otra ocasión.
Lo que está claro es que otra vez más los sufridos vecinos vamos a tener que pagar con nuestros impuestos las decisiones personales de los que cobraban para realizar las cosas, para realizarlas acorde a la ley.
¿Para cuando la responsabilidad patrimonial de los políticos en sus decisiones?

Por hoy ya es bastante. Haber que pasa de aquí a una semana, cuando ya todos sepan que además de los dineros, la Mancomunidad está totalmente viva y los trabajadores tiene derecho a volver a pertenecer a la misma. Por lo menos hasta el año 2015.
Como para aquella ya tendremos AVE, quizás las cosas ya vayan a otra velocidad.

 
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