Este viernes entra en vigor el decreto de la Xunta de Galicia que facilitará en toda la Comunidad gallega la conversión de los bajos comerciales sin uso en viviendas habitables. Conlleva la modificación de las normas de habitabilidad de Galicia para facilitar que este tipo de locales, tanto bajos comerciales como entresuelos en zonas urbanas, lo mismo si están abandonados como carentes de actividad, puedan ser reconvertidos en viviendas.

El decreto modifica las normas de 2010 que regulan las condiciones que deben cumplir tanto las viviendas nuevas como las rehabilitadas, si bien habrán de ser los concellos los que podrán determinar las zonas de sus respectivos municipios "en los que se podrá eximir a estos locales en planta baja de los requisitos de privacidad exigibles a cualquier vivienda o rebajar los criterios generales en ciertos casos", señala el decreto de la Xunta.

En todo caso, las modificaciones de las normas de 2010 permitirán ahora una altura de 2,5 metros para poder transformar un bajo en vivienda, y no los 3,2 que hasta ahora se exigían; se facilitan los espacios exteriores a los que se podrán abrir las viviendas para poder ser tales; y, en el caso de espacios ubicados en cascos históricos, contará la cocina como uno de los dos espacios de la vivienda con salida al exterior en vez de las dos habitaciones principales (salón o/y dormitorios) que se exigían hasta ahora. También en el caso de inmuebles en los cascos históricos, el diámetro mínimo para que los patios de manzana computen como zonas exteriores se reduce a medio metro, en vez de los 70 centímetros que se exigían hasta ahora.

Todo ello, según señala la Xunta, entre otras medidas que se suavizan en aras de facilitar la habitabilidad de los mencionados espacios.