El Concello de Ourense comunicó a primera hora de la tarde de este jueves, la entrada en servicio de las rampas de la calle Concordia, las primeras de la ciudad en entrar en servicio. Cuando tal hizo el equipo de Pérez Jácome al frente del Concello de Ourense, se daba cuenta también de que había sido preciso repararlas tras ser "objeto de un acto de sabotaje en su primera noche de funcionamiento". Así que las rampas habrían entrado en funcionamiento la tarde-noche del viernes, aunque el Concello no informó del hecho.

Este sábado, el Concello informó de "actos vandálicos que inutilizaron cinco de los siete elementos" de que constan el conjunto de movilidad vertical de la calle Concordia de la ciudad. Lo que hizo preciso solventar durante la mañana del sábado los problemas generados la noche anterior. Luego, el Concello anunciaba su reposición y que "incrementará desde hoy (desde este sábado) la vigilancia de las rampas". Funcionarán de 7 de la mañana a 12 de la noche.

La obra concluye con cinco meses de retraso sobre los propios plazos del regidor municipal, así como un incremento presupuestario considerable y modificaciones del proyecto inicial llevadas a cabo sobre la marcha. Es el primero de los veinte elementos de movilidad vertical que figuran en la agenda del actual Gobierno de la ciudad, recuerda el propio Pérez Jácome. En este caso, las rampas se extienden en unos 250 metros de la mencionada calle con un desnivel medio del 7%.