El Concello de Ourense anunció este miércoles que incorporará a la normativa municipal para blindar las asignaciones a los grupos municipales frente a las operaciones de transfuguismo, el acuerdo del 8 de enero, "aprobado por unanimidad", de adhesión del Concello de Ourense al Pacto Antitransfuguismo y al Pacto por la Estabilidad Institucional, así como la declaración en tal sentido de la Federación Española de Municipios y Provincias, la FEMP.
Con tales adhesiones, el Gobierno municipal estaría tratando de reforzar el acuerdo plenario que culminará tanto la elaboración de la correspondiente modificación de las bases de ejecución de los presupuestos municipales, como el acuerdo favorable al mismo adoptado en Xunta de Goberno del viernes de la semana pasada, 22 de octubre.
El Pleno de noviembre se celebrará en el Auditorio Municipal, pese a que podría celebrarse en el Salón de Plenos del consistorio. Sin embargo, el alcalde considera que al tener las sesiones una media de duración de 7 horas, "en las que los ediles no podrían sacarse las mascarillas en ningún momento, ni para beber agua", el escenario del Auditorio resulta "más recomendable".
El acuerdo del 8 de enero no fue unánime, matiza el BNG
Al anuncio realizado por el Gobierno municipal, este mismo miércoles el BNG introduce una corrección: "en el Pelno del 8 de enero se ausentó de la votación de la moción de DO sobre transfuguismo por considerarla una estrategia para desviar la atención de los problemas de su partido". La corrección se refiere al "aprobado por unanimidad" del que habla el Gobierno al referirse acuerdo del mencionado 8 de enero.
El portavoz del BNG, Luis Seara, incide, de paso, en que el transfuguismo y garantizar los recursos de los grupos municipales para su propio funcionamiento le interesa a Jácome menos que "seguir captando dinero público". |