El sistema de franjas de protección que establece la Consellería de Medio Rural de la Xunta para proteger los núcleos rurales frente a los incendios, no es todo lo eficaz que debiera, aseguró el BNG este viernes al pedir en el Parlamento gallego que se cambie el sistema. Según la parlamentaria autonómica por Ourense, María Albert, "no se pueden tirar los recursos en rozar el mismo matorral año tras año". El BNG plantea, simplemente, dar utilidad a estas fincas situadas en estos perímetros "con usos y labores que eviten la acumulación de combustible". En la propia rentabilidad habrá mucho más interés por cuidarlas.

Otro de los frentes a corregir son los plazos con los que se trabaja: "advertir a los propietarios de la obligación de limpiar la finca hasta el 31 de mayo; plazo de espera; inspección por parte del concello; comunicación del concello a Seaga del incumplimiento; inspección por parte de Seaga; comunicación de apremio; nuevo plazo de espera de 15 días; preparativos para la ejecución, si hay medios humanos... ¿a qué día estamos ya, pasó el fuego?, porque nada se habría hecho", señaló Albert. La parlamentaria nacionalista subrayó en la Comisión de Agricultura que el procedimiento actual no funciona porque "dilata los tiempos hasta hacerlo inútiles".