La proliferación de los parques eólicos en tiempos de pandemia (muchos de ellos en numerosos concellos de la provincia de Ourense) ha llegado a la Comisión Europea. La portavoz del BNG en Europa, Ana Miranda, ha denunciado este martes la instalación de 3 parques eólicos en esta provincia con un potente impacto ambiental y visual, que pueden comprometer los espacios de la Red Natura 2000 y que todos ellos pertenecen a la compañía noruega Statkraft. Miranda habla de parques eólicos "sin control" que "ponen en riesgo zonas de gran valor medioambiental no solo en Ourense y que surgen al amparo del "afán desmesurado del gobierno por instalar parques eólicos".

Nada de ahora sino de hace años, pero ahora favorecidos por la pandemia. Colectivos del movimiento ecologista consultados por Ourense Dixital sostienen que "están aprovechando el momento", cuando las movilizaciones no están autorizadas y la libertad de movimientos es muy restringida. Una coyuntura que las promotoras de los parques están aprovechando, entre otras ayudas que reciben de las administraciones a la hora de tramitar los proyectos.

Miranda aludió en la Comisión Europea a los parques de Rebordechao, Prada y Barjas en las provincias de Ourense-León, pero que evacuarían los 450 megavatios capaces de generar en esta provincia con una red de 75 kilómetros de líneas de alta tensión monte a través por zonas de alto valor ambiental. La portavoz nacionalista señaló que los 81 aerogeneradores que totalizan los 3 parques "están vendiendo el rural", y que "forman parte de un plan de blanqueo de energías renovables que se pretende hacer sin participación pública e incumpliendo la normativa europea". Ana Miranda recordó a este respecto que la Directiva Europea sobre Hábitats señala que cualquier plan o proyecto que pueda afectar de forma apreciable a un lugar Natura 2000, "tiene que someterse a una adecuada evaluación de sus repercusiones en el lugar".