Un acuerdo mayoritario de los propios trabajadores de Urbanos de Ourense, S.L., decidió entrada la tarde de este jueves aplazar la huelga indefinida en el transporte urbano que estaba previsto comenzar este mismo viernes, día 15. La medida se adoptó tras considerar los inconvenientes tanto para el desarrollo de la propia medida como para los ciudadanos y los propios trabajadores, que supondría la coincidencia de dicha medida con la entrada en vigor de las nuevas restricciones por causa de la pandemia. Las dos entrarían en vigor a un tiempo, a las cero horas de este viernes.

El aplazamiento de la medida se adopta sin que suponga la suspensión de la huelga convocada con carácter indefinido, por lo que se traslada a la empresa el mensaje de "aprovechar este paréntesis obligado para demostrar que tiene voluntad real de alcanzar un acuerdo en las condiciones básicas de trabajo y firmar un convenio digno para los 120 trabajadores de Urbanos de Ourense. La decisión llega después de que el Concello de Ourense fijara este mismo jueves los servicios mínimos para garantizar el transporte público en la ciudad, y haberlo comunicado a la empresa. Y el Comité de huelga recalca que la decisión de ha adoptado "por responsabilidad".

Los trabajadores asumen que su inicio y el de las restricciones por la pandemia supondrían un escenario complicado que no permitiría "que la huelga se pueda desarrollar con todas las garantías". No se podrían garantizar legalmente los movimientos de los piquetes informativos, las reuniones, las concentraciones y otras medidas, y no se considera adecuado colocar "el derecho de huelga por encima de la salud de la ciudadanía, los usuarios y los propios trabajadores". En tal escenario, el Comité de huelga concluye que los trabajadores de Urbanos de Ourense, S.L., adoptan la decisión de aplazar la huelga "haciendo un ejercicio de responsabilidad basado en el sentido común".