El BNG anunció en Ourense este miércoles el inicio de una campaña dirigida a Renfe y Adif para que repongan las líneas de servicios ferroviarios suprimidos durante el pasado Estado de Alarma, precios justos y en consonancia con los que pagan las restantes provincias gallegas por los servicios del Avant y que cese el cierre de los despachos de billetes presenciales en las estaciones ourensanas. "Queremos reivindicar un trato justo para Ourense", señaló la diputada autonómica Noa Presas.

Presas anunció el inicio de inmediato de una campaña de agitación social, "cartelería, volantinas y un modelo de alegaciones para que la gente envíe a Renfe y Adif a fin de que esta situación se rectifique", señaló. La parlamentaria volvió a incidir tanto en la supresión de servicios que lleva produciéndose en toda la provincia desde la etapa del confinamiento por la pandemia, como la más reciente supresión del Avant Ourense-Santiago-A Coruña de las siete menos cuarto de la mañana. Unos recortes que repercuten sobre estudiantes y trabajadores que a diario tienen que desplazarse a Compostela y a la capital coruñesa.

También incidieron los nacionalistas en una vieja reivindicación en relación con el precio de los billetes de esta línea y este tren: "es inconcebible que Ourense siga pagando hasta un 60% más de lo que pagan otras frecuencias que atraviesan el Eixo Atlántico". Una situación que no ha cambiado pese al acuerdo unánime del Parlamento de Galicia instando a Renfe y Adif a reajustar los billetes de los servicios ferroviarios.