"Qué más se debe hacer para que alguien intervenga?... O van a tener que entrar las fuerzas de seguridad y desalojar la Casa Consistorial para intentar evitar que la gente se contagie?... Porque llegamos a unos extremos que son difíciles de explicar a cualquiera", afirmó el portavoz del grupo municipal socialista cuando, a las ocho y media de la mañana, los tres grupos oposición en el Concello de Ourense anunciaban que no acudirían al Pleno de agosto de las 9 de la mañana.

Rafa Villarino subrayaba que la oposición ni tiene el informe de Sanidade ni lo ha visto: "no podemos ser tan irresponsables como para poner en riesgo la salud de la gente, ya llega que lo hagan catorce", afirmaba el portavoz del PSdeG-PSOE. Y anunciaba, además, que la oposición no va a participar en reunión alguna de los órganos municipales mientras la situación derivada del positivo de Covid detectado el viernes en un trabajador del Concello, no se aborde como considera que es debido proceder.

Por su parte, el portavoz del BNG recalcaba que "no existen explicaciones de lo que ha ocurrido hace unos días". Luis Seara incidía también en que el proceder del Gobierno municipal y de su alcalde en particular, "es un mal ejemplo para la ciudadanía". De ahí que "no ir al Pleno es una cuestión de responsabilidad, con la salud de las personas no se puede jugar", señalaba Seara. Ya que, además, "el Pleno se podría celebrar dentro de unos días y no pasaría nada", concluyó.

El portavoz de Ciudadanos aludió a que no solo es a la oposición a la que el Gobierno municipal niega explicaciones, sino que también los funcionarios adolecen de la "debida" comunicación. Pepe Araújo volvió a incidir en el malestar interno existente en el grupo de Gobierno municipal: "hoy tenemos que decirle a los compañeros de Democracia Ourensana que centren a su líder. Y después tenemos que pedir al señor Baltar, al señor Feijóo y a los concejales del grupo municipal del Partido Popular en Ourense que a ver si son capaces de darle un toque de dignidad a esta ciudad".