La no disposición de Jesús Vázquez tanto a abandonar su escaño en el Concello de Ourense como a facilitar el liderazgo de otro compañero de grupo, genera cada vez más división y malestar en el seno de los populares ourensanos. En el primero de los casos, un sector del PP aboga por facilitar con su renuncia el acceso a un escaño de José Jesús Cudeiro Mazaira, número 9 de la lista, y persona a la que su partido considera como la más apropiada para colocar al frente de la Concellería de Urbanismo que le corresponderá administrar al PP. Pero a Cudeiro Mazaira lo consideran abiertamente los de Vázquez Abad un hombre de Manuel Baltar.

Las alertas del PPdeOU se encienden tanto por el hecho de que el partido no pueda defender lo que el propio José Cudeiro había llevado a cabo en materia de revisión del PXOM durante el pasado mandato; como por el hecho de que nadie entre los actuales concelleiros populares está tan cualificado como él para ponerse al frente de su concellería estrella. Y a todo esto hay que añadir dos hechos más: el peso que tienen en el grupo los afines de Jesús Vázquez, pues todos y todas son hombres y mujeres que colocó en la lista el ex alcalde y ahora senador, a excepción de Jorge Pumar; y el peso que a través de Jesús Vázquez y los suyos tendrá en este grupo Núñez Feijóo y el PP de Galicia.

La situación roza lo rocambolesco cuando Jesús Vázquez invoca ser el cabeza de lista para sostener su liderazgo en el Grupo Municipal del PP. Como senador estará fuera de la ciudad al menos 3 días cada semana y, de llegar a dirigir el grupo, lo haría el único concelleiro que declinó responsabilidades en el Gobierno por delante del que ocupa la tenencia de alcaldía es decir, el alcalde de la ciudad en caso de ausencia de Gonzalo Pérez Jácome. El día a día del Concello para Jesús Vázquez estaría necesariamente vinculado a una comunicación a distancia con su grupo, lo que ha llevado a algunos militantes a advertir del riesgo de que el PP se convierta en "un grupo de whatsapp".