Aunque el fallo todavía no es firme al caber contra él recurso de apelación ante la Audiencia Provincial, el Juzgado de lo Penal 1 de Ourense absuelve a la ex concelleira de Urbanismo Áurea Soto y a un técnico municipal de los delitos de prevaricación que se les imputaban por la concesión en 2011 de licencia de apertura y primera ocupación a la Residencia de Estudiantes del Campus de Ourense. Imputación que partía del hecho de que la promotora del inmueble no había ejecutado las obras de urbanización.

Ahora, el Juzgado de lo Penal 1 de esta ciudad concluye que, si bien tal es cierto y, por ello, la concesión de las licencias de ocupación y apertura no se ajustaron a legalidad; "esa controversia de la legalidad urbanística no puede llevar a concluir que la conducta de los acusados sea constitutiva de los graves delitos cuya comisión les imputa la acusación particular". Y añade que el criterio aplicado en este caso ya había sido utilizado en otras ocasiones por el personal del Concello de Ourense. "Nos encontramos ante una cuestión interpretativa de la norma que deberá quedar al margen del derecho penal", señala la sentencia. Y el juez entiende que en el caso del que se ocupa el fallo, concurrían "circunstancias que justificaban la aplicación del mencionado criterio", tales como la imposibilidad de realizar las obras de urbanización, la prestación de aval o ingreso en metálico para realizar su realización y el cumplimiento de los trámites y requisitos exigidos.

En tal situación, entiende la sentencia que la ex concelleira socialista de Urbanismo y el técnico del Concello de Ourense que participaron en la tramitación y concesión de las licencias de ocupación y apertura, eran conscientes de la ausencia de las obras de urbanización, pero también es cierto que tal circunstancia "no le era imputable a la promotora de la residencia universitaria", señala el juez titular del 1 de lo Penal de Ourense.