El Gobierno municipal de Jesús Vázquez con el alcalde a la cabeza, quedó este jueves en evidencia en el pleno extra convocado para salvar la situación generada por la imposibilidad de pagar 4 facturas de 2017 del Servizo de Axuda no Fogar (Dependencia) a la empresa Valoriza. Nunca como ahora quedó en evidencia una irregularidad de gestión tan cantosa como la del equipo de Vázquez Abad, que incrementó el coste del servicio tan gratuitamente como este jueves en Pleno tuvo que asumirlo el alcalde.

Sin embargo no fue sin que a Jesús Vázquez le costara hacerlo. El Pleno lo convoco, incluso, con el argumento de resolver la "discrepancia" que había generado el "Sr. Interventor", cuando la discrepancia la generó el propio Jesús Vázquez y su equipo. Después, en el transcurso del Pleno, Vázquez Abad escondió cuanto pudo las magnitudes de sus despropósitos, evitando, por ejemplo, cuantificar el incremento del servicio operado con absoluta frivolidad. Finalmente, urgido por la necesidad de que al menos el PSOE y Ourense en Común lo indultaran, apeló a un histórico "sacar adiante o erro que nun momento cometín".

Para entonces, el propio Interventor municipal ya había dejado claro nada más comenzar el Pleno el alcance real del error, que luego el portavoz del PSOE advertiría a Jesús Vázquez que "é unha irregularidade, señor alcalde": lo que era preciso hacer este jueves en este pleno urgentísimo (más que urgente), era autorizar una modificación de crédito que posibilitara el pago en plazo de las facturas pendientes; y con ello no perder las ayudas en materia de Dependencia de la Xunta, que ya ha tenido que dar al Concello de Ourense una moratoria excepcional; y todo ello con cargo a próximos ejercicios económicos que "ya se verá que ocurre", advirtió el Interventor municipal, dado que el Concello sigue operando con el Presupuesto de 2014, Vázquez no aprobó ninguno ni se prevé que logre hacerlo, el mandato está agotado y en 8 meses habrá elecciones municipales.

¿Por qué logró salvar los trastos Jesús Vázquez? Según Martiño Vázquez porque, al menos, reconoció su error; y según Vázquez Barquero, porque no permitir el abono de las facturas supondría una reclamación vía judicial de Valoriza, intereses de demora en los pagos incluidos, finalmente pagaría más el ciudadano y, lo principal, el servicio se deterioraría considerablemente para aquellos que más lo necesitan, las personas dependientes. Sólo DO mantuvo su postura inicial, el voto negativo a la modificación de créditos. Cuando Pérez Jácome anunció que DO no cambiaría el sentido de su voto, socialistas y la marea tuvieron claro que les bastaba con abstenerse sin tener que apoyar al alcalde y a su Gobierno.