Unións Agrarias ha denunciado este jueves varias líneas de ayudas al campo gallego que, a bombo y platillo, ha publicitado estos días la Xunta de Galicia y que la organización sindical ha calificado de "descontrol" de la Consellería de Medio Rural. En realidad, si lo que el sindicato denuncia fuera cierto, excederían con creces dicho calificativo.

Unións Agrarias subraya que dichas ayudas son "incobrables na súa grande medida" debido a lo que determina el propio articulado de las ayudas. Tal es el caso de la última de las anunciadas, referida a un millón de euros para garantizar el aprovisionamiento de agua a las explotaciones. Según el sindicato, los fondos sólo se pueden destinar a rehabilitar pozos ya existentes pero que estén debidamente registrados. Todos los demás están fuera de dichas ayudas. Ante las quejas de los productores, el Diario Oficial de Galicia de este jueves publicó que, "en determinadas circunstancias, sí se autorizará perforar novas captacións". Pero habrá que solicitar permiso al correspondiente organismo de cuenca (la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil en la mayoría de los casos en esta provincia). Este trámite puede tardar entre un año y año y medio. Conclusión: para cuando el paisano pueda tener el pozo, el plazo de solicitud de las ayudas habrá concluido (finaliza el 30 de septiembre de 2018).

Otro tanto ocurre con las ayudas anunciadas para cubrir daños por la helada en el viñedo: cuando se preveía que estas ayudas estarían dotadas con 11 millones de euros, la Xunta de Galicia sólo destina medio millón, 22 veces menos de lo previsto. Como la Xunta indica, además, que las ayudas sólo serán para los viticultores que estén en régimen de autónomos, quedan fuera de ellas el 95% de los productores de vino gallegos.

Los 11 millones de euros de los que se había hablado para paliar daños y pérdidas causados el fuego, han quedado reducidos a 1,5 millones de euros. "Non cubre nin sequera as perdas ocasionados polos lumes nas forraxes", asegura el sindicato. Unións Agrarias pide a la Xunta de Galicia "que deixe de xogar coa desesperación das xentes do rural", y acusa a la Administración de Núñez de Feijóo de, incluso, anunciar líneas de ayudas que luego no son cobrables.