Casi 3.000 niños de esta provincia, exactamente 2.935 de 65 centros escolares según datos de la propia Consellería de Educación de la Xunta de Galicia, se han visto afectados este miércoles por la supresión del transporte escolar a sus respectivos centros escolares. Lo que no quiere decir que todos estos niños no hayan acudido a clase, ya que Educación no concreta tal aspecto al referirse, únicamente, a los afectados por la supresión de las líneas de transporte a causa de la meteorología.

Tal hecho entronca de lleno en el malestar que ha producido en numerosos padres de la provincia, el hecho de que la supresión del transporte escolar no haya supuesto la supresión de la actividad escolar. Por lo que muchos padres, ante el hecho de que sus hijos pudieran perder la actividad lectiva tanto de este miércoles como del jueves, optaron por llevar sus hijos a los centros escolares. Máxime cuando en muchos concellos el adverso meteorológico no era del calibre previsto por la Consellería ni por as agencias meteorológicas de referencia.

De hecho, la Consellería admite que la supresión del transporte afectó a los siguintes 51 concellos de la provincia: Amoeiro, Avión, Beariz, Boborás, O Carballiño, Coles, Maside, A Peroxa, San Cristovo de Cea, Padrenda, O Pereiro de Aguiar, San Amaro, Allariz, Bande, Baños de Molgas, Os Blancos, Castrelo do Val, Celanova, Cualedro, Entrimo, Laza, A Merca, Monterrei, Muíños, Oímbra, Rairiz de Veiga, Ramirás, Sandiás, Sarreaus, Verín, Vilar de Barrio, Vilardevós, Xinzo de Limia, Xunqueira de Ambía, O Bolo, Carballeda de Valdeorras, Castro Caldelas, A Gudiña, Maceda, Manzaneda, A Mezquita, A Pobra de Trives, Riós, A Veiga, Viana do Bolo, Vilariño de Conso, O Barco de Valdeorras, A Rúa, Rubiá e Vilamartín de Valdeorras. Sin embargo, las previsiones facilitadas el martes etablecían un total de 71 de los 92 de la provincia. Es decir, 20 menos de los previstos.

Ourense fue la provincia gallega a la que más afectó la medida, frente a los 2.174 y 50 centros de Pontevedra, los 1.449 y 48 centros de Lugo y los 1.360 en 14 centros de A Coruña. Educación indica que en ningún centro se suspendieron las clases. Muchos padres clamaron contra una medida que consideran "inadecuada", "parcial" e, incluso, "absurda".