Sólo horas después de abrir al tráfico, a las 4 de la tarde de este martes, a primera hora de esta mañana llegaron los primeros problemas a la Rúa do Concello tras los trabajos para su remodelación: en el tramo de su parte inferior, la que va desde Concepción Arenal a la intersección con la Rúa Alameda do Cruceiro, los estacionamientos en batería representan serios problemas para el tránsito del tráfico pesado, autobuses incluidos. De ahí que dichas plazas fueran valladas y se impidiera el estacionamiento en ellas mientras el problema no se resuelve.

Todo hace indicar que dichos problemas estarían en el proyecto, no en la ejecución de las obras, de ahí que los técnicos municipales las recepcionaran por ajustarse éstas al proyecto previamente que las rigió. En todo caso, la medida ha provocado revuelo entre los vecinos y comerciantes de la zona, que aseguran que ellos ya advirtieron en su momento de lo que ocurriría si se creaban las 17 plazas de estacionamiento en batería que el proyecto contemplaba. A lo largo de toda la mañana de este miércoles el asunto ha estado sub júdice entre los técnicos municipales y la Policía Local, reunidos en busca de alguna solución para un problema que tardó en aparecer lo que la remodelada calle en reabrir al tráfico.