La CIG se muestra muy crítica con el Consorcio Galego de Igualdade e Benestarante la situación derivada en el Centro de mayores de Taboadela, en donde las bajas de su personal apenas son cubiertas, salvo las de larga duración que se hacen con la demora de varias semanas ante la petición reincidente por parte de la propia CIG

Pese al esfuerzo de personal presente la CIG cree insuficiente el trabajo desenvuelto en una residencia, que con este trato es discriminatorio con las personas mayores, al no poder dar una cobertura eficiente a sus necesidades.

La CIG aboga por una política social igualitaria basada en las necesidades de las personas y en la que prime el esfuerzo y la eficiencia por parte de un Consorcio que curiosamente aboga como lema primordial de su actuación por la igualdad.