Ourense contabilizó en 2015 menos EREs, Expedientes de Regulación de Empleo, que en el año anterior, pero, por contra, fueron más los trabajadores despedidos a raíz de dichos expedientes. La CIG maneja datos de la Xunta de Galicia, que establecen que entre enero y diciembre de 2015 en Ourense fueron víctimas de algún ERE 162 trabajadores.  Estos 162 trabajadores que perdieron su puesto de trabajo durante el pasado año, son 109 más que los 53 que lo perdieron el año anterior, 2014. Lo que hace concluir a la central nacionalista que la pérdida de trabajo por algún Expediente de Regulación de Empleo en Ourense se incrementó el pasado año un 206% con respecto al anterior, más del doble.

Por contra, fueron menos los EREs que se resolvieron durante 2015, un total de 30 frente a los 72 del año anterior. La CIG incide, además, en que "reducíronse, sobre todo, os de redución de xornada". Como quiera que sea, menos EREs e 2015, pero más dañinos para el tejido laboral que los de 2014, aún siendo más. Por sectores, el de la industria fue el principal perjudicado en esta provincia: sólo en este sector se perdieron durante 2015 144 de los 162 puestos de trabajo que supusieron los EREs. Teniendo en cuenta que en 2014 el sector sólo había perdido 14 puestos, los datos de 2015 suponen un incremento de pérdida de tejido laboral industrial en Ourense del 929%. En cambio, en la construcción no se produjo ya en 2015 ningún despido colectivo.

La CIG insiste: su secretario comarcal en Ourense, Etelvino Blanco, cree que este elevado número de despidos "é consecuencia da reforma laboral aprobada polo Goberno do Partido Popular, que facilitou os despedimentos coa nova regulación legal dos ERE para beneficiar aos empresarios". El sindicato recalca que la principal utilidad de esta herramienta reside en propiciar despidos masivos y además baratos, "como unha medida para afrontar unha situación só coxuntural".