Siguen los trabajos de recuperación de los daños causados por las inundaciones del primer trimestre de este año de los cauces de la cuenca del Limia en los ríos Faramontaos, Nocedo, Bouzo, Firbeda y Limia propiamente dicho, según informa la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil. Actuaciones que supondrán en este caso una inversión de 140.000 euros sufragados íntegramente por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y que se producen al tiempo que se llevan a cabo otras en otras cuencas fluviales de esta provincia, como es el caso del Alto Arnoia en Vilar de Barrio.

En la cuenca del Limia, el objetivo de estas actuaciones, según señala el organismo de cuenca, es eliminar obstáculos, maleza y restos vegetales presenten en el lecho del río y mejorar las márgenes erosionadas con técnicas de bioingeniería que faciliten estabilizarlas y protegerlas a largo plazo.
En los ríos Faramontaos y Nocedo será preciso retirar más de 1.800 metros cúbicos de acarreos y estabilizar taludes erosionados en unos 200 metros lineales de cauce.

En el río Limia será preciso realizar una escollera granítica de 550 metros cúbicos para dotar de estabilidad a los taludes más afectados.
En el Bouzo se construirá un muro de escollera de 400 metros cúbicos con piedras de un tonelada de peso y cimentación hormigonada, para así asegurar las márgenes en diversos tramos del cauce.
Las actuaciones se completarán con las del río Firbeda, donde será preciso llevar a cabo labores de limpieza en ambos márgenes en un tramo de kilómetro y medio.