La Guardia Civil de Tráfico de Ourense detuvo a un conductor que circulaba por la Autovía A-52, las Rías Baixas, dando tumbos de un lado a otro de la calzada de tal calibre que llegó a golpear las barreras de protección de la carretera varias veces con los laterales del vehículo. Cuando el furgón fue interceptado por los agentes, el conductor tampoco atendió al alto ni la señalización luminosa que se le dio para hacerlo.

Finalmente, la detención del conductor fue posible después de que Tráfico montara un operativo de localización y detención. El furgón viajaba en sentido Benavente, y la Guardia Civil de Tráfico de Ourense ya tuvo conocimiento por la de Pontevedra de que en dirección a esta provincia circulaba un furgón que ponía en peligro la seguridad vial. Cuando se logró detener la marcha del furgón y se le hizo la prueba de alcoholemia al conductor, éste dio positivo con una tasa de alcohol que multiplicaba por 4 la máxima permitida.