La "frivolidade" de la oposición en el Concello de Ourense, PP, BNG y Democracia Ourensana, votando en contra y con ello vetando las modificaciones de crédito que planteaba el Gobierno municipal de la ciudad, costará a los ciudadanos más de 100.000 euros al año, que será lo que representará afrontar los intereses de unos créditos que el Gobierno municipal pretendía amortizar con la partida de 12.874.981 euros provenientes del remanente de Tesorería de las arcas municipales.
Así lo afirmó este lunes el concelleiro de Facenda del Concello de Ourense, José Ángel Vázquez Barquero.
A esta modificación se suma la de 716.372 euros con la que el Gobierno pretendía también hacer frente a facturas pendientes de proveedores, que también echó abajo la mayoría de la oposición.

De este modo, según reveló este lunes Vázquez Barquero, en una decisión que el concelleiro de Facenda calificó de "bastante estrana, cando menos", populares y nacionalistas vetaron hacer frente a deudas contraídas en más de un 50% del total por los predecesores de ambos grupos en el Concello ourensano. Según Vázquez Barquero, el 65% de esa deduda, 465.528 euros, corresponden a dos facturas de Aquagest de la última legislatura de Manuel Cabezas como alcalde de la ciudad, y fueron producto de un acuerdo del propio Cabezas en representación del Concello y José Luis Baltar como presidente de la Deputación.
Por otra parte, casi 50.000 euros en facturas pendientes corresponden a cuando el BNG tenía responsabilidades en el Gobierno ourensano, y corresponden a las etapas de Ana Garza e Isabel Pérez al frente de la Concellería de Termalismo.

En lo que respecta a los casi 13 millones de euros que el Gobierno municipal pretendía consignar a enjuagar la deuda que el Concello tiene con las entidades crediticias, Vázquez Barquero recordó que así lo estipula el Real Decreto de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, que obliga a canalizar los remanentes de dichas administraciones a enjuagar las deudas si las tuvieran. Por lo que el concelleiro dijo no entender el proceder de la oposición, y anunció que el Gobierno municipal procederá de inmediato a dar cuenta de la situación tanto al Gobierno del Estado como a la Xunta de Galicia.

Vázquez Barquero expresó claramente que, a tenor de la postura de toda la oposición en el Pleno ordinario de septiembre del pasado viernes, el Gobierno municipal de Ourense no se hace responsable de lo que se derive a proveedores de la imposibilidad de saldar las deudas del Concello de Ourense, ni de los intereses de demora y los gastos judiciales a los que haya que hacer frente, lo mismo que a los intereses adicionales que genere el no hacer frente a la operación de amortización de crédito pendiente con los casi 13 millones de euros del remanente de Tesorería.
El concelleiro de Facenda indicó, por último, que el Gobierno municipal "continuará co procedemento iniciado" llevando a Pleno el correspondiente reconocimiento extrajudicial de deuda para, de nuevo, plantear las modificaciones de crédito precisas "por si entón a oposición xa tivo tempo de reflexionar ao respecto", indicó Vázquez Barquero.