El Grupo del BNG en el Concello de Ourense se abstuvo de participar en el Pleno extraordinario de este martes solicitado por el Partido Popular, por varias razones que los nacionalistas sintetizan en que reprobaron primero y luego pidieron la dimisión del regidor municipal en sesión plenaria, y en que son precisas propuestas no conflictivas para la ciudad "e acabar cun Goberno e oposición instalados no conflito".

Los nacionalistas señalan, además, que los plenos de carácter extraordinario que pueden forzar los grupos que tengan más del 25% de representación en una corporación municipal, deben ser solicitados "para tratar temas de calado que afecten ao conxunto da sociedade", y no ser utilizados "como cohartada para continuar, no caso desta convocatoria a instancias do PP, con temas xa tratados polas forzas políticas noutras ocasións e para continuar coa bronca política na que está instalado o Concello de Ourense".

Los nacionalistas vuelven a apelar al adelanto electoral en el caso de esta ciudad, y sostienen que "a xudicialización da vida política iniciada polo Partido Popular e DO xunto coa mala xestión do PSOE teñen sumido ao Concello de Ourense nunha situación límite". Existe preocupación en la ciudadanía por esta situación, dice el Grupo del BNG, para la que los nacionalistas entienden que ahora mismo sólo cabe una salida: "o adianto eleitoral".

Los tres concelleiros que integran este Grupo municipal aprovecharon su presencia en el Consistorio de la capital ourensana minutos antes de la hora de comienzo del Pleno, las 9 de la mañana, para, al tiempo que anunciaban su renuncia a asistir a la sesión plenaria, presentar por Rexistro dos mociones para el Pleno ordinario de mayo a celebrar el próximo día 2.