Los efectos del botellón, especialmente durante los fines de semana, no se circunscriben a la Praza de Abastos y el lugar del rianxo, lo que han denunciado los propios praceiros, sino también a la Alameda do Concello, según afirma la concelleira del PP, Belén Iglesias.
La edil popular asegura que a vuelta de cada fin de semana, especialmente los lunes a primera hora, espacios de la Alameda como el reservado a los juegos infantiles, aparecen con claras señales de los efectos del botellón, entre otros, critales rotos.

El malestar que ha restañado el botellón en esta zona, especialmente entre los comerciantes de la Praza de Abastos y rianxeiros, lleva al PP a anunciar una moción al próximo Pleno del Concello de Ourense exigiendo al Gobierno una ordenanza que regule adecuadamente esta práctica.
No es la primera vez que los populares lo hacen, sólo que ahora la concelleira Belén Iglesias anuncia que el PP panteará que "nun prazo de 15 días se constitúa un grupo de traballo formado por un representante de cada grupo político e técnicos municipais, para elaborar a redacción definitiva dunha ordenanza específica que regule a práctica do botellón na nosa cidade".

Los populares entienden que el Gobierno se ha caracterizado al respecto por darle largas al asunto, y ahora plantea, así mismo, que la ordenanza en cuestión debería entrar ya en vigor con el nuevo año, en enero de 2014.
La moción habla de "pasividade administrativa" del Gobierno municipal, y el PP plantea al respecto la colaboración de todos los grupos para conseguir un texto lo más consensuado posible.