Quien quiera que sea, incluido el Sergas, precisa revestir de una etiqueta médico-asistencial cualquier operación que quiera acometer en las 31 hectáreas que suponen los terrenos del Psiquiátrico de Toén ahora abandonados. De lo contrario, los terrenos revertirían en el Concello y en los vecinos de Toén.
Así lo establece la escritura de cesión de estos terrenos, tal y como reveló Ourense Dixital el 5 de agosto de 2011.
Ya entonces se veía venir que esas apetecibles 13 hectáreas de suelo plantearían muchos problemas en cuanto se tratara de variar su uso.

La tercera escritura de cesión de los mismos, que se hizo en 1958, variaba al uso psiquiátrico el primer cometido de la de 1944, que establecía la cesión de los terrenos para la Leprosería del Norte de España.
Pero además, aquel documento de 3 de mayo del mencionado 1958, establecía, clara y rotundamente, que la finalidad de las 31 hectáreas, 46 áreas y 15 centiáreas que suponen los terrenos que había cedido el Concello de Toén al Estado, nunca podría tener otra finalidad que no fuera la del propio Psiquiátrico o "cualquier otra atención de tipo médico asistencial según las conveniencias sanitarias".

La naturaleza del terreno cedido ya en 1944 para una leprosería era de la de "monte comunal" de los vecinos de Toén, exactamente el "Monte Comunal Alongos". La cesión fue registrada por el Ministerio de la Gobernación con el número 8.587, inscripción 1ª, tomo 44, folio 151, del Registro de la Propiedad de Ourense.
Cuando el 3 de mayo de 1958 se varió el uso del suelo para albergar el Hospital Psiquiátrico, consta también en el documento que variaban los cometidos y la finalidad de las construcciones existentes en el mismo. Ese cambio de cometido fue suscrito por el entonces alcalde de Toén, el presidente de la Deputación y el gobernador civil en la Notaría del notario coruñés Emilio Torrado André.

El acuerdo dejaba constancia de que "circunstancias de orden sanitario nacional han aconsejado variar el destino de las edificaciones construidas y por construir /.../ para instalar un centro de asistencia psiquiátrica bajo la dependencia del Patronato Nacional de Asistencia Psiquiátrica".
Pero también de que, como queda dicho, independientemente de que "en el futuro, tal destino pudiera variar si las circunstancias lo impusiesen", nunca sería otro que el inherente a "cualquier otra atención de tipo médico asistencial".

Gobernación blindó escrupolosamente en 1958 el uso del suelo de Toén

Los responsables entonces de las instituciones implicadas en la cesión de los terrenos, primero, y en 1958 de la variación de su cometido, parecían contagiados de una especie de fiebre de transparencia en relación al uso de los terrenos.
Primero el Concello de Toén otorgó el 1 de abril de aquel año, 1958, poder a su alcalde para variar la escritura y permitir el Psiquiátrico en vez de la Leprosería; luego hizo lo propio el 22 de aquel mes la Deputación de Ourense; y, por último, el Ministerio de la Gobernación envió escrito al gobernador de la provincia, José Luis Albert, para que aportara al notario Torrado André la parte del acuerdo que no dejaba lugar a dudas.

De hecho, la alusión expresa a que los terrenos donde se encontraba instalada la leprosería pudieran ser destinados a sanatorio psiquiátrico y a cualquier otra atención pero sólo de tipo médico asistencial, es parte de ese escrito que Gobernación transmitió al gobernador de Ourense con la consigna de su inclusión en el documento notarial