Al cierre de la actividad de lo que el BNG califica de "un disparate", el portavoz del Grupo nacionalista en la Deputación, Leopoldo Rodríguez, califica la decisión de José Luis Baltar, entonces presidente de la institución provincial ourensana, como "unha das peores que se tomaron por parte do Partido Popular nesta institución".
Entre otras cosas porque, según el nacionalista, con la creación de esta sociedad la Deputación ourensana "pretendía incorporarse como promotora ao  mercado especulativo inmobiliario".
En su momento no fueron los únicos en cuestionar la iniciativa, sino también los que estaban en ese mercado y veían en Urbaourense "competencia desleal" en el negocio del ladrillo.

Para el portavoz nacionalista, una de las peores gestiones llevadas a cabo desde Urbaourense fue la transferencia que se hizo de las 4 parcelas, el 33% de los derechos urbanísticos, que le quedaban a la Deputación ourensana en Finca Santamariña: "Evidentemente, a finca Santamariña, de 178 hectáreas, era o pastel máis desexado polos promotores, pois estaba prevista a instalación dun centro de El Corte Inglés, un supermercado, un auditorio e a construcción de máis de un millar de vivendas distribuidas en torres de 17 alturas, das que a xestión de 475 quedaba en mans da Diputación. Iso sí, o Pai da criatura, Baltar Pumar, decidira, presionado pola oposición e nun evidente lavado de cara que Urbaourense actúe como operador na xestión de 175 viviendas de promoción pública, mientras as 300 restantes saen ao libre mercado", recuerda ahora el portavoz del BNG en la Deputación ourensana.

Lo que los nacionalistas califican de "disparate" contiene, también, el episodio de la creación de una sociedad con un capital inicial de 500.000 euros, que, aún así, contrató a un gerente con un "modesto" sueldo de 75.000 euros/año, incentivos al margen, Jesús Cudeiro Mazaira.
Al cierre de Urbaourense y tras numerosas vicisitudes, el portavoz de BNG incide en que las existencias de la sociedad ascienden a poco más de 19 millones de euros en 6 solares, 5 de ellos en la capital y el sexto en Nogueira de Ramuín.
Intervención reconoce que, "a día de hoxe, eses valores son inalcanzables, pois ese valor non é real, situándose en palabras da interventora moi probablemente por debaixo do 50%", en torno a unos 9 millones de euros.