De Xinzo en dirección a Maceda, el veto al tránsito a partir de las 16 toneladas se ubica a la entrada mismo de Vilar de Barrio. En sentido contrario, de Maceda a Xinzo, la señal aparece a la salida de la localidad de Arnuide.
En medio, como atrapada por la prohibición, queda Maus, una especie de centro neurálgico de los trabajos del subtramo Porto-Miamán de la Línea de Alta Velocidad Madrid-Galicia.
Sólo dos señales han sido suficientes para frenar toda la actividad de las constructoras este martes.

A primera hora de la tarde la actividad era escasa en los tajos. El único movimiento de camiones que se percibía era el de los que no precisaban pisar asfalto. El subtramo fue adjudicado en su día a la UTE Corvián-Corsán e Hidroestructuras en 88,7 millones de euros, y tiene una longitud de 6,5 kilómetros.
Nadie ha querido hacer declaraciones al respecto, aunque sí se ha confirmado que "los camiones no han trabajado este martes".
Nadie tampoco sabe con exactitud quien ha dispuesto la limitación a 16 toneladas del tránsito por esta carretera, aunque la orden se imputa a la Deputación ourensana por ser la institución provincial la titular del vial.

Tampoco se oculta que le medida ha sido "estratéxica", porque con sólo haber limitado 5 kilómetros de vial, se han bloqueado por completo los trabajos al no existir ninguna otra comunicación posible. Por ejemplo, ninguna salida a la autovía A-56.
En realidad no se ha tarado al tráfico pesado la OU-1102, sino los 5 kilómetros que atrapan las obras del AVE, y que van de Vilar de Barrio a Maus (4 kilómetros) y de Maus a Arnuide (1 kilómetro).