"La situación de las cuencas Miño, Sil y Limia, por ahora, no es preocupante", aseguró el presidente del organismo que las controla, la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, Francisco Fernánez Liñares, en curso de una reunión de la Comisión para situaciones de sequía que convocó la Xunta de Galicia. La reunión tenía por objeto hacer un seguimiento de las reservas de agua en la Comunidad, y poder diseñar y desarrollar actuaciones que mejoren la distribución de los recursos hídricos.

En el curso de dicha reunión, Fernández Liñares insistió en que "la guardería fluvial de esta administración hidráulica lleva semanas realizando un seguimiento continuo del nivel de los ríos y embalses", que, según Fernández Liñares, se completa con los datos que ofrece en tiempo real el Sistema Automático de Información Hidrológica, SAIH.
El presidente de la CHM-S matizó que, aunque "no hay problemas de abastecimiento a grandes poblaciones", si existen restricciones a núcleos de la provincia que se abastecen directamente de manantiales o de pequeñas corrientes.
Que a la Confederación Hidrográfica le consten, son los casos de parroquias de los concellos de Boborás, Castro Caldelas, Cortegada, Chandrexa de Queixa, Paderne de Allariz y Quintela de Leirado, en lo que respecta a la provincia ourensana.

Por último, según los datos que maneja el organismo de cuenca, los embalses del Miño, Sil y Limia se encuentran a día de hoy al 51,11% de su capacidad de embalsado.