Han llegado los primeros del contingente motorizado del nuevo Servizo de Limpeza del Concello de Ourense, que este miércoles revisó y presentó el alcalde de la ciudad. En el nuevo contingente de vehículos hay, incluso, una scotter que se ocupará de recoger los excrementos de los perros, potentes y prácticas aspiradoras manuales, y una barredora específica para las calles más angostas del Casco Histórico de la ciudad. En total supone una inversión de 1,4 millones de euros. El lavado de las zonas peatonales, la reducción de los tiempos de descarga y una menor emisión de ruidos son algunas de las mejoras que presenta la nueva maquinaria.
 
 
El nuevo Servizo de Limpeza de Ourense ya dispone de nueva maquinaria, que costó 1.400.000 euros
3 de JUNIO de 2010: OURENSE DIXITAL
   

El alcalde de Ourense presentó esta mañana la primera fase del nuevo servicio de limpieza municipal, con su nueva flota de vehículos que supone una inversión de 1,4 millones de euros.
El lavado de las zonas peatonales, la reducción de los tiempos de descargas y una menor emisión sonora, son algunas de las mejoras que comporta la, a su vez, mejoría que experimenta el servicio con la nueva concesionaria.
En la nueva flota hay también nuevos vehículos, entre los que se encuentran barredoras autopropulsadas, una motocicleta aspiradora de excrementos caninos y barredora eléctrica para el Casco Histórico de la ciudad, entre otros vehículos de última generación.

Todas las barredoras disponen de sistemas que humedecen previamente el pavimento para evitar la formación de polvo, y disponen, así mismo, de filtros en la salida de aire, lo que evitará el paso de polvo a la atmósfera fomentando así un ambiente más limpio.
También todos los vehículos disponen de climatización, de forma que incrementan el confort de los propios trabajadores que los manejan.

El contingente incorpora, además, tres aspiradores eléctricos manuales con una potente turbina que permitirá acceder a zonas donde no llega el resto de maquinaria, con un cómodo manejo para el operario. La motocicleta en principio asignada a la recogida de excrementos caninos, una scooter de 125 centímetros cúbicos, lleva asociada una turbina que, igual que recoge los excrementos, puede hacer lo propio con pequeños objetos y colillas, por ejemplo.

 
 
 
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