El autobús made in China que el Concello de Barbadás compró en su día y que ahora, según dice el PSOE, se encuentra aparcado en el bajo de la casa donde vive el alcalde, acabó por crispar el pleno de este lunes del Concello. Al punto de que el alcalde retiró la palabra al portavoz socialista, Xosé Carlos Valcárcel, que introdujo el molesto asunto del autobús eléctrico en el debate del transporte metropolitano.
Valcárcel reprochó al alcalde confundir “o público co privado cando ten a osadía de aparcar o microbús da vergoña, do despilfarro e da nefasta xestión no garaxe da súa casa”, a lo que Freire Couto, el alcalde, le advirtió, tajante, que si seguía hablando del autobús le retiraría la palabra.
El socialista volvió a hacerlo para explicar, según él, la relación entre el autobús y la “nefasta xestión” del alcalde en materia de transporte público, y Valcarcel se quedó unos 20 minutos sin hablar.

En  cualquier caso, el portavoz socialista pudo recuperar la voz a tiempo de reprocharle a Freire Couto, de nuevo, que “vostedes delegaron na Xunta o seu traballo, non están convencidos deste proxecto e o seu grado de implicación é cero”, en relación al proyecto del Transporte Mancomunado de Ourense y los concellos limítrofes.

La concelleira del PSOE, Victoria Morenza, defendió la moción del PSdeG-PSOE pidiendo un posicionamiento del pleno del Concello de Barbadás favorable al no cierre del Hospital de Piñor. Moción que fue derrotada por la mayoría del Gobierno popular, ya que, según el alcalde, “vostedes ven pantasmas donde non os hai”.
Sin embargo, los socialistas consiguieron arrancar un compromiso de Freire Couto similar al de Baltar Pumar en el último pleno, el de abril, de la Deputación Provincial. También en este caso dijo el alcalde de Barbadás que haría lo que el presidente de la Deputación si, llegado el mes de octubre, el Hospital de Piñor no reabre, que será defender los planteamientos, reivindicaciones y postura que ahora mismo plantea la oposición, PSOE y BNG.

La portavoz socialista dejó constancia en el pleno de Barbadás de que “foron os propios traballadores os impulsores e os que detiveron as ansias privatizadoras da Xunta de Galicia da Sanidade na provincia de Ourense”. Así como de que “os responsables do CHOU tiveron que oir o toque de trombón para porse firmes porque en todo este asunto o golpe de gracia deuno o Presidente da Deputación, José Luis Baltar, cando dixo que estaría cos grupos da oposición para reivindicar un hospital público e en funcionamento se en outubro non se reabría Piñor”.
Según Victoria Morenza, “un novo pulso que Núñez Feijóo volve perder, pero neste caso gaña toda a cidadanía da provincia”.
Fue entonces cuando el alcalde de Barbadás, José Manuel Freire, entonó un “eu tamén” y se compromotió a secundar a Baltar Pumar si la ocasión se produce como alerta la oposición.
Eso sí, de momento “non se poden ver pantasmas onde non as hai”, dijo Freire Couto para derrotar la moción.