Ya apostaron en su día por la recuperación del sobrio Pazo de Barbeirón, en la localidad de Sobrado, la última de A Pobra de Trives en dirección a Manzaneda, y ahora comparten con otros tres empresarios de la zona “Colores de Mencía”.
José Antonio López Pérez es el director-gerente del Pazo de Barbeirón, y asegura estar convencido de que este tipo de iniciativas funcionan: “Funciona allí (dice refiriéndose a Álava) y puede funcionar aquí, es más, nosotros estamos seguros de que aquí va a funcionar”.
Él fue uno de los treinta empresarios que viajaron con la Cámara de Comercio de Ourense a Álava para, sobre el terreno, comprobar como el enoturismo en la Rioja Alavesa representa una opción que complementa a la perfección gastronomía, vino y turismo propiamente dicho.
De hecho, el responsable del Pazo de Barbeirón asegura que “el año pasado ya comercializamos un paquete con Ribeira Sacra y nos funcionó bastante bien, muy bien sobre todo al principio”.
“El cliente siempre es un cliente muy fiel”, dice refiriéndose a este tipo de oferta, con un poder adquisitivo medio-alto, exigente a la vez que entendido, al que hay cuidar con exquisito trato.
La zona posee además los ingredientes adecuados para el maridaje entre gastronomía y vino. A eso se refiere la “cena con maridaje” que figura en la oferta, y que José Antonio López explica, sencillamente, como “una fusión de gastronomía y vino, en la que ninguno prevalece sobre el otro sino que se complementan adecuadamente, un vino que complementa a cada plato y un plato adecuado para cada vino”.
“Nosotros somos los que vamos a tirar de este proyecto, pero por supuesto que estamos abiertos a quienes quieran sumarse a él, cuantos más apoyos y cuantos más seamos, mejor”, dice con relación a “Colores de Mencía”.
Desde el pasado año funciona en Ourense este pazo del Siglo XVII recuperado por empresarios madrileños. El Pazo de Barbeirón es una construcción señorial ubicada a la entrada de la localidad de Sobrado, que logró resistir bastante bien el paso del tiempo hasta la llegada de sus nuevos propietarios.
A una fuerte inversión para lograr una cuidada recuperación del edificio, sigue la confianza de la apuesta que estos empresarios han hecho desde el principio por las posibilidades de la zona, y la continua búsqueda de alternativas y ofertas como “Colores de Mencía”. |
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