Tres de cuatro, A Chavasqueira, O Tinteiro y O Muiño da Veiga, son aprovechamientos termales de la ciudad que llevan ya días que no son operativos porque están bajo las aguas del Miño. El potencial termal de la ciudad, en el que el Concello de Ourense tanto se prodiga, está sujeto a los rigores del invierno y se resiente mucho cuando las lluvias son, sobre todo, persistentes. Pero desde el área de Termalismo y Tenencia de alcaldía no se obra en consecuencia advirtiendo de la situación y de la imposibilidad de tomar las aguas en estos puntos. Termalismo del Concello calla, y con ello oculta la realidad de una situación que roza estos días el fraude a los visitantes que acuden a la ciudad sin estar al corriente de la misma.
 
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Termalismo del Concello no divulga la situación real de las termas de Ourense estos días
18 de ENERO de 2010: OURENSE DIXITAL

El termalismo de la ciudad sigue resintiéndose de manera considerable de la persistencia de las lluvias de las últimas semanas, al punto de que tres de las cuatro instalaciones de disfrute gratuito y al aire libre seguían este fin de semana cerradas al público. El abundante caudal del río Miño mantuvo cerradas las de A Chavasqueira, O Tinteiro y O Muiño da Veiga, mientras en Outariz sólo afectó a la zona inferior pudiendo hacer uso los bañistas de la mayoría de las instalaciones. En el caso de A Chavasqueira, O Tinteiro y O Muiño da Veiga el corte de los accesos unos cuantos metros antes de los aprovechamientos termales, advierte ya de que la situación de los tres lugares de baño no son los normales.

Sin embargo, desde el Concello de Ourense los responsables del área de Termalismo en ningún momento han difundido la debida información sobre la situación de dichos aprovechamientos, y menos hecho constar al potencial visitante a estos efectos que los recursos de la ciudad no son tales debido a las circunstancias meteorológicas.
Algún bañista expresaba a primera hora de la tarde del sábado el disgusto que le produjo la situación en la que se encontró O Tinteiro, después de desplazarse desde Zamora para tomar las aguas de este lugar.
En ningún punto de la ciudad ni en las salidas donde se indica la dirección de los aprovechamientos termales, existe ningún panel informativo en el que se refleje que dichas termas están bajo las aguas del Miño estos días y, por lo tanto, inaccesibles.
Extremo tan cuestionado por los visitantes como que dice muy poco del celo que Termalismo del Concello debería poner en no “vender” lo que estos días Ourense no tiene.

En realidad el potencial termal de la ciudad en el que tanto incide el Concello de Ourense, pero especialmente la Tenencia de Alcaldía y la concellería de Medio Ambiente, es un valor sujeto a los rigores e, incluso, a los caprichos meteorológicos, pese a los esfuerzos que por regular los caudales puedan hacer las hidroeléctricas en las presas ubicadas río arriba.
En numerosos puntos de todo el entramo termal por las riberas del Miño, se hace constar, bien visible, la existencia de “variaciones de caudal y cota”. Que ya en los primeros días del año 2000, concretamente la noche del 5 de enero, tuvieron efectos devastadores en el proyecto termal en desarrollo por el Concello que entonces dirigía como alcalde Manuel Cabezas.


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