La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil propone una sanción de 450.000 euros (75 millones de las viejas pesetas) al Concello de San Cibrao que dirige como alcaldesa la popular Elisa Nogueira, por los vertidos al río Barbaña del mes de junio pasado. La Confederación ha anunciado ese lunes, seis meses después de que se produjeran los hechos, que esta misma semana elebará al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, MARM, de la ourensana Elena Espinosa, la propuesta de sanción al Concello de San Cibrao, al que considera responsable de los vertidos.

Las evaluaciones realizadas confirmaron la muerte de 17.000 peces, la práctica totalidad de la fauna piscícola del Barbaña desde donde se produjeron los vertidos hasta su desembocadura en el Miño. La Confederación que preside Francisco Fernández Liñares evalúa en 220.000 euros el “daño al dominio público hidráulico” causado por la contaminación, por lo que la sanción propuesta se eleva a los mencionados 445.000 euros que, eso sí, tendrá primero que ratificar el departamento de Elena Espinosa y, luego, ser aprobada en Consejo de Ministros.

Al hacerse público el resultado de las actuaciones llevadas a cabo por la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, el órgano de cuenca “niega, por tanto, la inactividad de la que fue acusada la CHM-S, así que no se vaya a sancional al citado Concello”, señala la nota emitida este lunes al respecto.
Añade la Confederación que “las continuas agresiones que sufre el río Barbaña son objeto de preocupación de su presidnete y de los técnicos”, y se advierte que continúa la tma de muestras de las aguas del Barbaña “para hacer seguimiento estricto de la calidad de las aguas”.

Tal seguimiento atañe directamente al nuevo vertido detectado el jueves de la semana pasada, sobre el que, por ahora, la Confederación no se pronuncia “a la espera de que se concluyan las analíticas más avanzadas”.