El mercado de la vivienda libre en Ourense se encuentra también en fase de recesión, aunque menos que en el resto de Galicia y España, y ha experimentado también aquí “una importante corrección de precios”.
Así lo establece el informe de la Asociación de Empresarios Inmobiliarios de Ourense, ADEIDO, del que ya el pasado día 29 de septiembre se adelantaban algunas claves. Todas ellas ahora confirmadas por un informe que establece las principales pautas del mercado libre de vivienda nueva y usada.

ADEIDO confirma que la estadística correspondiente a los meses de mayo, junio, julio y agosto pasados, confirma la tendencia alzista de las operaciones hipotecarias en esta provincia con respecto a las de 2009. Por muy sorprendente que resulte, de las 310 concedidas en 2008 se ha pasado a las 389.
También constata la Asociación que ninguna entidad de crédito financia ya más del 80% del valor de tasación de la propiedad, constituyendo ese 20% restante, así como gastos e impuestos relativos a la operación, “una barrera que muchos no pueden superar”.

La vivienda nueva ha experimentado una corrección de precios también significativa en Ourense. En el caso de la vivienda libre nueva, la bajada ha sido del 8%, mientras la vivienda usada ha caído un 19%.
El precio actual de la vivienda en la provincia se sitúa en los 1.675 euros por metro cuadrado.
El sector experimentó un repunte de las operaciones de compra-venta los meses de mayo y junio pasados, pero durante julio y agosto la tendencia ha vuelto a caer. Eso sí, ADEIDO dice que en septiembre se ha constatado otro leve repunte.

En cuanto a la vivienda usada, crece el interés por la que se ubica en los concellos limítrofes con el de la capital, lo que atesora el hecho de que durante este período las ventas de este tipo ha subido un 118%.
Junto a este dato, ADEIDO destaca que se va equilibrando la demanda entre uno y otro tipo de vivienda, nueva y usada, suponiendo ya este último el 48% frente al 52% de la vivienda nueva.

La crisis en Ourense no va con las hipotecas, pero alquilar piso sí que se ha puesto crítico