El informe del SEPRONA establece que 70 perros de la perrera de O Carballiño aparecieron muertos a primeros del mes de marzo pasado, y que muchos de ellos fueron a parar a fosas en los que algunos estaban depositados cubiertos de cal. Días después, varios colectivos trasladaron la situación en forma de denuncia a la Consellería de Medio Ambiente. En abril, el colectivo Matar por matar, NON, subió a la Red una serie de fotografías espeluznantes de la situación en la que vivían y morían los perros en la Canceira de A Medela. Ahora, por la información difundida y las fotos, serán juzgados el 19 de octubre acusados por el Concello de O Carballiño de haber irrumpido sin permiso en la perrera. Uno de los responsables del colectivo, Xulio Fernández, asegura que el número de canes que desaparecieron de la perrera está más cerca de los 150 que por debajo de los 100.
 
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14 de AGOSTO de 2009: OURENSE DIXITAL
Más de 100 perros podrían haber desaparecido de la Canceira de A Medela, la perrera municipal de Carballiño. El pasado 3 de marzo, representantes de Matar por matar, NON, Amigos da Terra y ADEGA, se personaron en el Juzgado de Carballiño para denunciar las deficiencias que presentaba la perrera, lo que se uniría a un informe del Servicio de Protección de la Naturaleza, SEPRONA, de la Guardia Civil, en el que se establece la cifra de al menos 70 perros muertos.

La cifra que maneja Xulio Fernández, de Matar por matar, NON, deriva del hecho de que, como voluntario en su día al cuidado de los perros de la

Canceira de A Medela, pudo constatar que “de repente, apareceron gaiolas valeiras das 37 que hai na canceira, e faltaban moitos cans dos casi 300 que había naqueles momentos”.
En la actualidad constan unos 120 perros en la perrera de O Carballiño. Fernández establece que no menos de 100 perros, cifra que podría llegar hasta los 150, “desapareceron de repente”.

Su desparición se produjo en el momento en que tanto los representantes de Matar por matar, NON, Amigos da Terra y ADEGA como el SEPRONA hallaron fosas comunes de cadáveres de perros, muchos de ellos cubiertos de cal. Situación que también refleja en su informe el Servicio de Protección de la Naturaleza.

“Achado froito da casualidade”

Xulio Fernández será uno de los que el 19 de octubre próximo se siente en el banquillo del Juzgado de O Carballiño, acusado de haber irrumpido en la perrera sin autorización y haber sacado las fotos en cuestión.
Sin embargo, el miembro de Matar por matar, NON, señala que sí tenía libre acceso entonces a la perrera, ya que, como voluntario en la misma, “traballamos alí sete meses”.

Fue precisamente a raíz de una visita a la perrera una mañana, explicó Xulio Fernández, “cando, sorprendidos, descobrimos gaiolas valeiras e que faltaban moitos cans”. Alarmados por lo que pudiera haber pasado en la perrera, se dio cuenta de los hechos a la Guardia Civil. “Todo o que veu despois xa se pode imaxinar, foi cando nos atopamos coas fosas cos cans mortos, moitos deles cubertos de cal, algunhas crías que sabíamos que facía poucos días que naceran, pero foi un achado froito da casualidade xa que nós nin buscábamos nin imaxinábamos algo así”, señala Xulio Fernández.

El representante de Matar por matar, NON en O Carballiño recalcó que, pese a todo, “o Concello sigue sin respostar”, y que lleva persiguiendo al colectivo y a sus representantes “coa intención sempre de amedrentarnos, porque cometemos o delito de denunciar estas barbaridades”.
De hecho, el Concello de Carballiño negó siempre los hechos denunciados por este colectivo, Amigos da Terra y ADEGA, hasta que el informe del SEPRONA constatando la existencia de las fosas y los perros muertos echó por tierra los desmentidos del Gobierno que dirige el socialista Carlos Montes.

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