La concelleira del BNG Marta Arribas solicitó este lunes su cese como responsable del área de Termalismo. Lo hizo al tiempo que sus compañeros de "tournée" por Alemania y Chequia comparecían ante los medios de comunicación para rebatir las críticas del Grupo del Partido Popular. Pero evidenciando que, al contrario de lo manifestado por su jefe de filas, Alex Sánchez Vidal, ella no se quedó fuera del viaje porque hubiera querido.
Sánchez Vidal manifestó este lunes que Marta Arribas, la titular de Termalismo, no formó parte de una expedición con clara vocación y finalidad termal "para aforrar recursos".
Si ya era difícil de creer, después de la decisión de la concelleria Arribas resulta inverosímil de todo punto.

La edil, responsable también de Xuventude y Voluntariado, manifiesta su intención de seguir al frente de estas áreas y desvincularse únicamente de Termalismo. Lo achaca a "injerencias" de algunos de sus compañeros y el teniente de alcalde en sus competencias. Y no oculta que el detonante de esta decisión haya sido este reciente viaje a Alemania y Chequia en el que ella no tomó parte.

De este modo, Marta Arribas se desliga del grupo de afines a Sánchez Vidal, en el que únicamente están ya Ana Garza y Andrés García Mata. Hace ya algún tiempo que se distanciaron Isabel Pérez y Fernando Varela. Marta Arribas había permanecido en un plano neutral e intermedio, sin tomar parte ni partido por ninguno de ellos. Sin embargo, el desprecio hacia sus competencias con la que está siendo tratada por el jefe de filas del BNG, Alex Sánchez Vidal en beneficio de Ana Garza, la sitúa ahora fuera e incluso enfrentada con la esfera de la Tenencia.

La decisión, en la que han jugado un papel relevante las denuncias del Grupo del Partido Popular denunciando desde un primero momento que la concelleira de Termalismo se había quedado en Ourense no por decisión propia sino de Sánchez Vidal, aboca al Grupo del BNG a pasar por la remodelación que afrontó el pasado día 8 de abril su socio en el Gobierno municipal. Ya entonces Francisco Rodríguez manifestó que, aunque la remodelación no afectaba al Grupo del BNG, no se descartaba para más adelante.
Ahora serán los propios nacionalistas los que tengan que pedirla al regidor socialista.