Al constituir la agrupación municipal de Nogueira de Ramuín, el PSdeG-PSOE está a sólo 8 municipios de los 92 que conforman la provincia ourensana de conseguir el pleno para la implantación del órgano más básico del Partido Socialista en la totalidad de la provincia ourensana. Así lo reconocía el propio responsable de Organización del Consello Provincial del PSOE ourensano, Miguel Fidalgo, cuando afirmaba al constituirse el de Nogueira de Ramuín que, "de feito, tan só quedan oito concellos nos que non se ten constituído aínda unha agrupación".
En este caso, el de Nogueira, el mismo Fidalgo Areda reconocía que han sido "máis de dez anos loitando por ter unha agrupación municipal en Nogueira de Ramuín".

Y es que llegar a algunos pequeños municipios de una provincia que sigue presentando un esquema municipal altamente atomizado, representa para el PSOE y el BNG los problemas que el PP ni tiene ni ha tenido, al heredar la estructura de Coalición Galega a través de la incorporación a los populares de Centristas de Galicia.
El secretario de los socialistas ourensanos, Manuel Vázquez Fernández, ya consiguió en las pasadas Municipales de 2007 completar listas en los 92 municipios, pero fue a costa en algunas ocasiones de aglutinar independientes bajo las siglas del PSOE. E incluso en alguna ocasión la lista socialista sólo tenía del PSOE las siglas. Lo que ha deparado riesgos como los que en A Pobra de Trives se tradujeron el 31 de junio del pasado año en una moción de censura que, auspiciada por dos independientes en la lista del PSOE, llevaron a la alcaldía al popular Luis Álvarez.

La constitución de las agrupaciones municipales, entendido como un proceso más costoso pero más serio por cuanto más sólido, se explica por Fidalgo Areda como "un síntoma de loita contra o caciquismo". Y en el caso de Nogueira de Ramuín, "unha loita contra unha rede de dominio estendida pola familia Baltar, que dificulta as condicións lexítimas da democracia".
Esta especie de pica en Flandes que los socialistas consideran que han colocado en territorio Baltar, sitúa a una mujer, Antonia Álvarez Veiga, como secretaria del partido allí donde Baltar Pumar fue alcalde tantas veces como quiso, y desde donde fraguó su proyección política a la presidencia de la Deputación de Ourense, de su partido y llegó incluso al Senado.
Alcaldía que Baltar dejó situando en ella a un socialista que ganó para su causa y para sorpresa de propios y ajenos, Eugenio Galindo, cuyo paso por el cargo duró lo que una sóla legislatura.

Ahora, abiertamente, el responsable de Organización del PSdeG-PSOE en Ourense, Miguel Fidalgo, anuncia la estrategia y los objetivos de los socialistas de Manuel Vázquez: "que non exista nin un só punto negro ao que non chegue a democracia". Es decir, que el PSOE esté en los 92 concellos de la provincia ourensana.