La única novedad que contabilizó la huelga de los trabajadores de Vidriera del Atlántico que finalizaba con las 6 de la madrugada de este martes, fue el frío que el turno del lunes por la mañana tuvo que soportar al exterior de la factoría. Una carpa instalada "como se pudo", señaló el dirigente de la CIG, García Torres, contribuyó en la medida de lo posible a mitigar los rigores invernales de Xinzo de Limia este lunes por la mañana.

Por lo demás, la convocatoria se desarrolló según lo previsto. Pendiente de una valoración cerrada que se producirá este martes, ya que la medida finalizaba con las 6 de la mañana de este 27 de enero, el Comité de Empresa ya hablaba al mediodía de este lunes de "éxito total" de la segunda convocatoria.
Al igual que ocurriera con la primera, la del 11 al 13 de este mes, el respaldo de la plantilla fue "total e unánime", y sólamente entraron en el interior de la fábrica los trabajadores afectados por los Servicios de Seguridad y Mínimos dispuestos por la Dirección de Vidriera.

Así mismo, también hay acuerdo en esta ocasión en el lugar donde ha de ser destruída la producción resultante de las 32 horas de esta segunda "quenda" de huelga. Será en el interior de la propia nave de Vidriera en Xinzo, y no en Portugal como había ocurrido en la primera ocasión, y con el compromiso ahora de la Dirección de la Empresa a hacerlo con total transparencia.