Al siguiente día del fracaso de la moción de censura en Calvos de Randín contra el alcalde socialista Aquilino Valencia, desde el PSOE en Ourense se le recomienda al presidente del PP en esta provincia, José Luis Baltar, "que se vaia canto antes". Los socialistas advierten a Baltar Pumar de que las cosas ya no son como antes, y que "as súas prácticas antidemocráticas e caciquís xa non se permiten", por lo que, insisten, "debe irse xa".
El secretario de Organización del PSdeG-PSOE de Ourense, el senador Miguel Fidalgo, afirma que la historia política del presidente del PP en esta provincia "caracterízase por ficha cargos doutros partidos a golpe de enchufes, contratacións ou outras mercadorías", y se recuerda que pocos municipios de esta provincia se han librado de este tipo de operaciones. Recuerda el dirigente socialista que "comprou tránsfugas en Castro Caldelas, Sarreaus, Melón e Maceda, entre outros municipios".
Vinte persoas "disfrazadas"
Sostiene Fidalgo Areda que el presidente del PP ourensano, bien por sus actuaciones, bien con sus declaraciones, aparece cada vez más próximo a los autores de la moción de censura de Calvos de Randín y a la propia operación fallida.
Además, según el dirigente socialista, la veintena de personas que conformaban una especie de "cordón de seguridad" de los autores de la moción de censura, que Fidalgo Areda define como "vinte persoas disfrazadas ao estilo Caiga Quien Caiga", son personas vinculadas al Partido Popular, "incluso algúns son íntimos amigos de Baltar", sostiene el socialista. Lo que, para Fidalgo Areda, constituye otra prueba que vincula a Baltar Pumar con la moción de censura de Calvos de Randín.
El secretario de Organización del PSOE de Ourense califica de "inadmisible" el hecho de que los tránsfugas de Calvos de Randín llegaran al lugar del pleno acompañados por estas personas, que considera que eran "falsos gardas de seguridade que o único que buscaban era crear conflito, ameazando e intimidando aos veciños". |