"Yo le digo que un atentado de ETA algo quiere decir", señaló el presidente del Partido Popular de Ourense, José Luis Baltar, al referirse al atentado del viernes pasado, día 7, cuando la banda terrorista asesinó al ex edil socialista de Mondragón, Isaías Carrasco. "Aquí algo hubo", añadió Baltar Pumar.
De la "lectura lógica de los hechos" que el presidente de los populares pidió hacer, tanto de lo ocurrido el 11-M de hace cuatro años como del pasado 7-M, concluyó el presidente de los populares ourensanos que en el primero de los casos "se pretendía un cambio de gobierno", y en el segundo "no fue para beneficiar al Partido Popular".

Así mismo, el presidente del PP de Ourense criticó lo ocurrido a la muerte y con el asesinato de Isaías Carrasco, respecto a lo que, sin concretar a qué exactamente se refería, afirmó que "con todo el respeto del mundo a su viuda y a su familia, a mi me dio vergüenza, no pretendo manchar la victoria del PSOE, pero eso no se hace, lo hacemos nosotros y nos corren a gorrazos, nos asedian las sedes y nos tiran por la ventana".
"Aquí hubo algo", repitió Baltar Pumar sin concretar más.

Qué peligro tiene Baltar.
El sólo hecho de que diga que "un atentado de ETA algo quiere decir" es como decir que un atentado de ETA algún sentido tiene.
Esa sola frase en sí misma y por sí sola, es todo un peligro.
Con el simple ejercicio de repetirnosla dos o tres veces, se cae en la cuenta del peligro que tiene.
No se puede decir eso y, a renglón seguido, seguir hablando "con todo el respeto del mundo" a la familia de Isaías Carrasco. Entre la que está esa hija que seguro que ni el viernes, ni hoy ni nunca podrá entender que lo que ETA hizo con su padre tiene el menor sentido.
Ni lo tendrá jamás.