La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia, ADEGA, alertada, dice, por los propios vecinos del Concello de Monterrei, acaba de denunciar lo que califica no sólo como "unha actuación neglixente por parte da Administración pública", sino que entiende que constituye además "posible delito contra o medio ambiente e os recursos naturais". De hecho, ADEGA asegura que, de inmediato, trasladará a la Fiscalía todas las pruebas recogidas para que actúe en consecuencia.
Los hechos a los que se refiere la asociación ecologista se producen en una zona de concentración parcelaria del Concello de Monterrei conocida como "A Trabe". Señala ADEGA que antes de llegar a la fosa séptica a la que deben ir a parar los vertidos de las redes públicas de saneamiento de las localidades de Vilaza y Albarellos, la conducción se derivó subterráneamente "cara un pequeno regueiro que vai derivar ao río Búbal", afluente del Támega. El vertido se localiza cerca del Polígono empresarial de Pazos, del Concello de Verín, en una zona conocida antiguamente como "A Lagoa".
De la importancia del vertido da idea, según ADEGA, su caudal, 300 litros/segundo, "un vertido moi considerabel" según la asociación ecologista, que apunta además que "chega a fomar por sí mesmo un regueiro caudaloso que vai pola marxe dunha leira cara ó río Bubal en percorrido de 300 metros ao aire libre".
Para ADEGA, el comportamiento de las autoridades responsables de este vertido y su consentimiento es el propio "da delincuencia de tipo ambiental". |