Al menos 900 hectáreas de monte han sido pasto de las llamas en 3 de los incendios que continuaban activos la tarde de este miércoles en la provincia de Ourense. A esas 900 hectáreas hay que añadir las 62 calcinadas por los fuegos de A Pobra de Trives y Montederramo, ambos ya controlados.

Sin la necesaria precisión a la hora de facilitar datos la Consellería de Medio Rural, se indica que son ya unas 300 hectáreas de monte las que lleva devastado el fuego de Chandrexa de Queixa que afecta a la parroquia de Queixa, según Medio Rural, técnicamente inexistente en dicho concello. Trabajan en su extinción sólo 5 brigadas y 3 agentes, además de 6 helicópteros y 2 aviones, según datos de la Xunta.

Mayor superficie lleva asolado el incendio declarado en montes de la parroquia de Infesta del concello de Monterrei: 350 hectáreas. Aquí operan 34 brigadas y 17 agentes, además de 19 motobombas y 3 palas y, por aire, 11 helicópteros y 4 aviones. Mayor dispositivo que el de Chandrexa de Queixa, lo que ocurre también con el fuego de Castro Caldelas declarado en la parroquia de O Burgo, que lleva quemadas 250 hectáreas. En la lucha contra las llamas toman parte 24 brigadas y 8 agentes, además de 14 motobombas y 1 pala, 7 helicópteros y 4 aviones.

En lo que a la provincia ourensana respecta, están controlados los fuegos de A Pobra de Trives (parroquia de Cova, límite con Queixa) y Montederramo (parroquia de Marrubio en las proximidades también de Chandrexa de Queixa). En ambos casos todo hace indicar que la superficie ardida quede fijada en los 62 hectáreas, 20 en el de Cova, Trives, y la 42 restantes en el de Marrubio, Montederramo.