Las 5 asistencias técnicas por las que el juez Leonardo Álvarez, titular del Juzgado de Instrucción núm. 1 de Ourense, ha decidido procesar al ex alcalde de la ciudad, Francisco Rodríguez, y a la ex concelleira Áurea Soto, "se realizaron en los mismos y exactos términos que las más de 20 realizadas por los anteriores gobiernos municipales del Partido Popular, sin que sobre estas se haya producido denuncia o investigación alguna", señala en un comunicado emitido este miércoles por la ex concelleira de Urbanismo, Áurea Soto.
Las 5 asistencias técnicas a que se refiere el auto que se conoció este pasado martes, "fueron contratadas por el actual Gobierno municipal ajustándose estrictamente a la Ley", señala la es munícipe ourensana.

Soto Vázquez afirma que el levantamiento de los reparos del Interventor que en su día hizo el ex alcalde, "es un mecanismo legal para abonar servicios que, de no pagarse, se incurriría en enriquecimiento ilícito de la Administración", señala la ex concelleira. Que considera "sorprende" la resolución judicial al tiempo que recuerda que la denuncia partió de un funcionario de este Concello que tiene un sueldo bruto de 60.000 euros anuales, y que solicitó en su día compatibilidad para dar clase en la Universidade de Vigo pese a la prohibición que para ello hace la Ley de Incompatibilidades.
No hizo tal, denunciar, este mismo funcionario, Javier García Gago, cuando la Oficina de Rehabilitación del Concello de Ourense funcionó con más de 20 asistencias técnicas, "de lo que era perfectamente conocedor".

Alude la ex concelleira a que todo el proceso que ha precedido al auto del juez Álvarez conocido este martes, imputó a 11 concelleiros, directores xerales del PSOE y del BNG, y una serie de daños colaterales que ahora sustancia la autoridad judicial en 5 asistencias técnicas evitando las anteriores "bajo el mandado del PP".
Siendo el magistrado el mismo que ha transformado en acusación de prevaricación la querella de la Plaza de San Antonio, Áurea Soto vuelve a exigir que se celebre la vista oral "con rapidez, para no añadir al daño ya causado la injusticia de una demora injustificada".