El Contencioso Administrativo tendrá que dirimir si el Pleno que el Concello de Amoeiro celebró el pasado 30 de diciembre vale o no. Y, en tal caso, si los acuerdos adoptados por el Gobierno municipal valiéndose de su mayoría son también válidos. El Partido Popular anuncia que abocará tales extremos a los juzgados para que sean ellos los que se pronuncien al respecto.
El Pleno tuvo carácter extraordinario, y de él supo la oposición el día 26.

Sin embargo, pese al calado de asuntos tan importantes como el que figuraba en el primer punto del orden del día, la regularización de la situación del personal laboral del Concello de Amoeiro, a l a la oposición "non se nos achega ningunha documentación, da adhesión ao convenio dásenos fotocopia do BOP de data 4 de xaneiro de 2013  e a documentación relativa aos Orzamentos entréganolos o luns día 29".
En el orden del día tratado estaba también la adhesión al convenio de cooperación entre la Deputación de Ourense y los concellos para ordenar la gestión del servicio de recogida de animales abandonados, y la designación de vías y plazas públicas con los nombres de anteriores regidores municipales de Amoeiro.

El Grupo Municipal del Partido Popular advirtió en el transcurso del Pleno que entre la convocatoria de una sesión plenaria y ésta no pueden transcurrir menos de dos días hábiles, salvo en el caso de las sesiones extraordinarias de carácter urgente. Por tanto, que el Pleno "non se axustaba a legalidade", insisten los populares, "dado que o sábado, día 27, e o domingo, día 28, as dependencias do Concello permaneceron cerradas, ao igual que todos os sábados e domingos do resto do ano".
De este modo, argumentan que no les fue posible recoger información necesaria para afrontar los asuntos del orden del día del Pleno.

Los populares afirman no querer ser "cómplices do atropelo institucional" del alcalde socialista de Amoeiro, al que acusan de intentar limitar el trabajo de la oposición sin darle tiempo suficiente para estudiar los asuntos a tratar. Ya que, sostiene el PP, la documentación esconde, entre otros propósitos, una subida "encuberta" del sueldo del alcalde y de los impuestos directos sobre los vecinos, en los casos del IBI y del de vehículos de tracción mecánico, entre otros.
Y recuerdan que desde que el socialista Rodríguez Villarino es alcalde, los impuestos en Amoeiro han subido un 104%.